Navegando por el mar de la información: Un modelo táctico para la gestión de información exitosa

En el océano turbulento del mundo empresarial actual, la información es el timón que guía nuestro rumbo hacia el éxito. Sin embargo, administrar este valioso recurso de manera efectiva puede ser un desafío titánico. Es aquí donde entra en juego nuestro modelo táctico, una brújula infalible para navegar por el mar de la información y alcanzar las costas doradas de la eficiencia y la productividad.

1. Zarpando del presente: ¿Dónde estamos?

Antes de embarcarnos en esta travesía, es fundamental comprender nuestra posición actual. ¿En qué nivel de madurez se encuentra la gestión de información (GI) en nuestra organización? Para responder a esta pregunta, debemos evaluar nuestras capacidades actuales, incluyendo la arquitectura para el análisis y las herramientas de GI que estamos utilizando. Identificar y establecer las brechas entre nuestro estado actual y el deseado es un componente crucial en este proceso.

2. Estableciendo el faro: ¿A dónde debemos llegar?

Una vez que hemos determinado nuestro punto de partida, es hora de definir nuestro destino. ¿Qué queremos lograr con la gestión de información? Para ello, es necesario establecer una Estrategia de GI clara y concisa, definir nuestras Metas y Enfoques por Horizonte, y seleccionar las Herramientas de GI adecuadas que nos ayudarán a alcanzar nuestros objetivos.

3. Trazando la ruta: ¿Cómo lo haremos?

Con nuestro destino en mente, es hora de trazar la ruta que nos llevará hasta él. Esta etapa implica la Organización por Dominios, es decir, agrupar la información por áreas temáticas o funcionales. También es necesario establecer un Gobierno de GI, un marco de trabajo que garantice la calidad, consistencia y seguridad de la información. Además, debemos crear un proceso replicable de implementación del gobierno para cada grupo de información, y establecer mecanismos para el Seguimiento y Medición de los Resultados, asegurando que estamos progresando hacia nuestras metas.

4. Asignando roles: ¿Quién es responsable?

Para navegar por este mar de información con éxito, es fundamental definir quién será responsable de cada parte del proceso. Esto implica establecer un Modelo Organizativo, una estructura de personas designadas para ejecutar las tareas en gestión de información, desde la capacitación hasta velar por los temas de calidad de los datos.

5. Poniendo manos a la obra: ¿Qué haremos?

En esta etapa, entramos en los detalles específicos de las acciones que tomaremos. Estas acciones pueden variar dependiendo de nuestra organización y nuestros objetivos específicos. Algunos ejemplos incluyen acciones para cerrar las brechas identificadas en la evaluación inicial, implementar la arquitectura objetivo, y crear y desarrollar una Librería de Casos de Uso.

6. Estableciendo el cronograma: ¿Cuándo lo haremos?

Finalmente, es importante establecer una Hoja de Ruta. Este documento proporciona un cronograma detallado de cuándo se llevarán a cabo las diferentes acciones y actividades. La Hoja de Ruta nos ayudará a mantenernos organizados y enfocados en nuestros objetivos.

Recordatorio: Un viaje personalizado

Es importante recordar que cada organización es única, por lo que es fundamental adaptar este modelo táctico a nuestras necesidades específicas. No existe una fórmula mágica que funcione para todos, pero al utilizar este modelo como guía y ajustarlo a nuestro contexto particular, podremos navegar por el mar de la información con confianza y alcanzar las costas del éxito.

¿Necesitas más información?

 

Si necesitas mayor detalle sobre las herramientas y el proceso, no dudes en contactarme a ricardo@sacpma.com. Con gusto te compartiré más información para que tu viaje hacia una gestión de información exitosa sea lo más placentero posible.